Los miembros del equipo compartieron que su amor por los retos de la «cultura del hack» les facilitó la formación del grupo. Cuatro de ellos ya se conocían de competiciones previas, y el quinto, que fue recomendado por uno de ellos, se integró rápidamente, formando así un equipo cohesionado. La colaboración y el trabajo en equipo jugaron un papel crucial en su desempeño durante la competición.
La experiencia en los Hackulteth resultó ser no solo interesante, sino también educativa. A pesar de que las tareas eran desafiantes, el equipo trabajó con motivación, hasta altas horas de la madrugada, lo que demuestra su dedicación y pasión. Se organizaron en función de sus fortalezas individuales para abordar cada tipo de tarea. Lograron resolver muchos de los desafíos hasta casi las cinco de la mañana, algo que consideraron valioso.
Uno de los retos más desafiantes que enfrentaron fue la sección de tareas binarias, que no pudieron completar del todo. Sin embargo, uno de los desafíos que más destacó fue el llamado «calculadora», en el cual todos los miembros contribuyeron de manera efectiva en la identificación y resolución de vulnerabilidades, haciendo de su equipo el único capaz de completarlo exitosamente.
La competencia no solo fue una plataforma para la resolución de problemas, sino que también les permitió adquirir nuevos conocimientos y valiosa experiencia, que planean aplicar en su desarrollo profesional futuro. Han expresado un fuerte interés en participar nuevamente en competiciones similares, considerando que son una excelente oportunidad para aprender y establecer conexiones dentro de la comunidad de ciberseguridad.
Cuando se les preguntó sobre sus perspectivas después de concluir sus estudios universitarios, las respuestas variaron. Algunos se ven orientados hacia carreras como desarrolladores o expertos en seguridad cibernética, mientras que otros muestran apertura a diferentes trayectorias laborales. En general, todos tienen el deseo de aplicar el conocimiento adquirido en sus futuras carreras de la manera más efectiva posible.
Este equipo de jóvenes entusiastas representa una muestra clara del talento excepcional que existe en Croacia, dispuesto a enfrentar los desafíos que presenta el campo de la seguridad cibernética. Su éxito en esta competencia es solo un indicativo de que están en el camino correcto y apenas es el comienzo de su prometedora carrera profesional.
En resumen, el equipo «Consensus», formado por cinco estudiantes con experiencia previa en competencias de hacking, logró destacar en Hackúrgico al mostrar un gran trabajo en equipo y una dedicación excepcional. Con planes de seguir participando y un enfoque en aplicar su aprendizaje en el futuro, representan el potencial y la pasión de los jóvenes en el campo de la ciberseguridad en Croacia.
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