El desarrollo del hardware de la VTT Q50 ha implicado un extenso esfuerzo en investigación y aprendizaje, tal como lo comentó Pekka Pursula, gerente de investigación de VTT. En comparación con gigantes tecnológicos como Microsoft, Google y Amazon, que utilizan tecnologías distintas basadas en semiconductores, la tecnología de la VTT Q50 se centra en qubits superconductores. Según Pursula, la competencia en este campo es feroz, y no hay un consenso claro sobre cuál tecnología prevalecerá en el futuro.
El diseño de la computadora cuántica implica un considerable sistema de enfriamiento, alcanzando temperaturas cercanas al cero absoluto para poder operar de manera efectiva. Jan Goetz, fundador y CEO de IQM, destaca que Finlandia ha logrado articular una comunidad de física cuántica de clase mundial, lo que es vital para el desarrollo continuo de la tecnología. Con la capacidad de construir alrededor de 20 computadoras cuánticas por año, IQM se está posicionando firmemente en el mercado a pesar de que sus dispositivos todavía no poseen la misma cantidad de qubits que sus homólogos estadounidenses.
Desde el punto de vista estratégico, el Ministro de Asuntos Económicos, Wille Rydman, sugiere que las computadoras cuánticas tienen el potencial de transformar el orden mundial, afectando áreas críticas como la ciberseguridad, la defensa, las finanzas y la medicina. Rydman enfatiza la necesidad de colaboración internacional en la esfera de la tecnología cuántica para maximizar sus beneficios. Sin embargo, también reconoce que la computación cuántica no es una panacea para todos los problemas tecnológicos.
Teiko Heinosaari, profesor de cálculo cuántico en la Universidad de Jyväskylä, hace una analogía sobre la complejidad del uso de computadoras cuánticas, comparando el proceso con la navegación en un mapa familiar versus en un desierto. Aún no está claro en qué áreas se pueden aplicar plenamente las capacidades de las computadoras cuánticas, y el progreso en este sentido requerirá de exploración y experimentación.
El gobierno finlandés sigue comprometido con el avance de esta tecnología, habiendo otorgado a VTT fondos adicionales de 70 millones de euros para la creación de una nueva computadora cuántica con una capacidad de 300 qubits. La variabilidad en el poder de cálculo de las computadoras cuánticas, que puede fluctuar debido a las propiedades inherentemente probabilísticas de la mecánica cuántica, sigue siendo un reto a superar.
La computación cuántica se basa en fenómenos de la física cuántica, como la superposición, a diferencia de las computadoras clásicas que solo operan con valores binarios de 0 y 1. Esta característica de superposición permite realizar múltiples cálculos simultáneamente, haciéndola adecuada para resolver problemas complejos que son difíciles o imposibles de abordar con las supercomputadoras actuales, incluyendo áreas como el desarrollo de fármacos, criptografía y modelado molecular.
En resumen, Finlandia está emergiendo como un centro de innovación en computación cuántica, impulsando la investigación y el desarrollo tecnológico a través de importantes inversiones estatales y la colaboración entre academia y sector privado, al tiempo que enfrenta la competencia global en un sector de alta tecnología y estratégico.
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